Soldados del Ejército Mexicano, lograron asestar la madrugada de ayer sábado otro fuerte golpe al “Cartel del Pacífico Sur”, al capturar en el lupanar “Fantasy”, localizado en el municipio de Jiutepec, tras un enfrentamiento a Gabriel Francisco Ochoa Escobar de 22 años de edad alias “El Chaparro” y a Eduardo Morales Cruz apodado “El Lalo”, presuntos brazos ejecutores de esta organización, jefes de “La Plaza”, en este municipio, que comanda Julio Radilla alias “El Negro”, quien se encuentra prófugo, y a dos de sus cómplices, así como dos damiselas y a Joaquín Estrella Castillo y José Luis Olivo Aldama gerentes del “Fantasy” y del prostíbulo “40 Grados”, cuando departían con los sicarios.
Los militares lograron en total detener a cuatro presuntos sicarios del “CPS”, a dos mujeres que se dijeron amantes del “Lalo”, de nombres Miriam Pizaña Ortiz y Raquel Blas Alarcón, así como a los lugartenientes de este y del “Chaparro” de nombres Sergio Gallegos Maya alias “El Sergio” e Israel Garfias Saldaña de 31 años de edad, a quienes los militares los encontraron en poder de un rifle AK-47 conocido comúnmente como “Cuerno de Chivo”, seis cargadores para esta arma y decenas de cartuchos, dos pistolas una calibre 45 y una 38 super, además de un uniforme militar de camuflaje, una chamarra color negra con las siglas de la SSP en la espalda que portaba “El Chaparro”.
De la misma manera los militares aseguraron en el lugar cinco vehículos presumiblemente con reporte de robo y que eran conducidos por los sicarios y sus cómplices entre estos, tres camionetas una Equinox color gris placas, HFD-64-65 del estado de Guerrero, una Jeep del mismo color placas 117-SCE del Distrito Federal, una Ram Journey color vino placas HFD-17-88 del estado de Guerrero, dos automóviles Jettas color rojo y negro placas 784-XHF y 424-WTP del Distrito Federal respectivamente.
Se reveló que en la madrugada de ayer entre las 4 y 5 de la mañana una llamada anónima alerto a los militares, de que en el citado prostíbulo se encontraban algunos sicarios del “CPS”, lugartenientes del “Negro”, por lo que al arribar los uniformados al lugar fueron recibidos a balazos desde el interior de antro, al tratar de darse a la fuga los delincuentes.
Tras la inicial resistencia, los militares acordonaron totalmente la zona y no permitieron que nadie entrara ni saliera del lugar, y tras varios momentos de tensión y tiroteos, obligaron a los hampones a rendirse, en tanto 27 personas más entre empleados del tugurio, clientes y taxistas, quedaran por igual retenidos para ser entregados al agente del Ministerio Público Federal y que sea este quien deslinde responsabilidades.
De acuerdo a las primeras informaciones obtenidas por los militares, “El Chaparro”, originario de Chiapas y su segundo “EL Lalo”, junto con sus cómplices y amantes todos ellos con domicilio en el Jiutepec, algunos en la comunidad de Tejalpa, “se dedicaban a levantar y ejecutar a violadores, secuestradores y ladrones, por ordenes del Negro, calculándose en varias decenas sus víctimas que tiraban a lo largo de la autopista México-Cuernavaca y sus alrededores”.
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