El estado de Yucatán aún conserva todo el sabor de la cultura maya. Entre manglares y playas, Paqui Peña nos presenta un lugar que fascinó a varios madrileños.
Encontramos a Daniel maquillando a Erika Cruz, que fue miss México en 2001 y ahora es una conocida modelo. Nos enseña el Gran Teatro de Mérida, del siglo XIX, la catedra, el museo de arte moderno y la plaza Hidalgo, el pintoresco centro de una ciudad de un millón de habitantes y que tuvo un pasado glorioso. A una hora de camino llegamos a la costa, donde disfrutamos de una excursión para ver flamencos entre los canales de manglares hasta llegar al ojo de agua de Celestún, una fuente natural de agua dulce que brota del subsuelo.
También en Mérida encontramos a Mari Carmen, que se ha trasladado con su familia para hacer negocios. Visitamos mercados típicos. Nos trasladamos a Izamal, la ciudad amarilla, y los cenotes de Cuzamá, pozos de agua dulce a los que hay que llegar en vagones tirados por burros.
Miguel, que llegó a México por amor, se dedica a vender comida española en su propia casa. Emprendemos viaje hacia el este y a 2 horas y media de Mérida encontramos Chichén Itzá, considerada la Séptima Maravilla del Mundo, y asistimos al ritual del Temazcal para contactar con la madre Tierra.
De vuelta a la capital del estado encontramos a Jorge, que da clases de tenis y ha sido prácticamente pionero en la introducción del pádel en la zona. Conocemos Sisal, una de las zonas de playa virgen de Yucatán, y Chicxulub, a 10 kilómetros de Mérida, donde cayó el gran meteorito que provocó la extinción de los dinosaurios hace 65 millones de año.
Por último, María del Mar, a sus 70 años nos muestra sus ganas de vivir y su coquetería mientras paseamos en calesa por la zona colonial de Mérida
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