Ecuador busca proteger a sobreviviente de matanza en México

El Gobierno de Ecuador busca garantizar la seguridad del ecuatoriano Luis Freddy Lala, sobreviviente de la masacre de 72 inmigrantes en el estado mexicano de Tamaulipas, y de sus familiares que permanecen en el país. El gobierno de México ya dio a Freddy el status de testigo protegido.

La Secretaría Nacional del Migrante (Senami), por su parte, informó que Ecuador está en contacto con los padres de Freddy "para ofrecerles todo el apoyo necesario y hacer factible una comunicación con su hijo, y para que puedan escucharle desde el hospital de México y conocer sobre su estado de salud".

Luis Freddy Lala Pomavilla, que recibió una herida de bala en el cuello y sobrevivió a la matanza porque se hizo pasar por muerto, logró avisar a la Policía sobre la masacre en la que murieron 54 hombres y 18 mujeres que le acompañaban en su intento de llegar a EEUU.

El joven es oriundo de la comunidad campesina de Zer, una localidad de unas 400 personas en la zona andina del sur de Ecuador había pagado 11.000 dólares a quien ahora hostiga a su familia para alcanzar el sueño americano. Esperaba reunirse en territorio estadounidense con sus padres, que viven hace años allí, y conseguir un trabajo que le permitiera enviar dinero a su esposa de 17 años embarazada, la única persona a la que le reveló que iba emprender el peligroso camino hacia el norte.

El fiscal ecuatoriano, Washington Pesantez, señaló hoy que iniciará una investigación sobre las redes de "coyotes" en la provincia andina de Cañar, al sur del país, de donde es oriundo el joven que sobrevivió a la matanza de México. El sobreviviente y autoridades mexicanas han señalado como responsables a 'Los Zetas', un grupo de militares que desertaron para unirse al cártel del Golfo en los años '90 y que ahora libran en Tamaulipas una pugna sangrienta con sus antiguos jefes. La masacre ha sacudido a México donde más de 28.000 personas han muerto desde diciembre de 2006 cuando el gobierno anunció una ofensiva contra los carteles del narcotráfico, incluyendo el despliegue de 50.000 militares.