Un aldeano chino ha perdido todos sus ahorros que guardaba en el establo de su casa.El pasado lunes un incendio arrasó su casa y el fuego destruyó los ahorros de toda su vida, unos 15.000 euros. A Sin San sólo le quedan sus billetes calcinados que no pueden ser canjeados en el banco. San es criador de cerdos y este incendio ha revivido el famoso cuento de la lechera: todas sus ilusiones han quedado reducidas a cenizas.
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