Guadalajara (México).- Trabajadores municipales de limpieza recogieron hoy en un parque público de la ciudad mexicana de Guadalajara un saco que creyeron era un perro muerto pero que al abrirlo descubrieron que se trataba del cadáver de un hombre.
Horrorizados, los barrenderos se toparon con el cuerpo en descomposición de un hombre de entre 40 y 45 años, con la cabeza cubierta con una bolsa de plástico.
Los trabajadores de limpieza explicaron que primero pensaron que en el saco había el cadáver de un perro y lo llevaron a las instalaciones donde son incinerados esos restos.
Según las autoridades, se trata de un asesinato vinculado con las bandas del crimen organizado.
Por otra parte, un presunto delincuente, jefe de una banda de secuestradores, murió hoy en un enfrentamiento a tiros con la policía en el balneario de Zihuatanejo en el Pacífico mexicano, informaron fuentes oficiales.
El tiroteo se registró esta madrugada cuando policías federales fueron recibidos a tiros por Miguel Ángel Valencia, presunto jefe de una banda de secuestradores, quien murió en el enfrentamiento.
En la norteña ciudad de Monterrey fue asesinado hoy a tiros Arturo Adrián Bracamontes, ex director jurídico de la policía de esa ciudad, informó la policía estatal.
Un grupo de sicarios disparó contra Bracamontes quien estaba dentro de un automóvil junto con otra persona, la cual resultó herida.
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